Woody Allen."Me interesa el futuro porque es el sitio donde voy a pasar el resto de mi vida."
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Harold Lloyd en "El hombre mosca", de Fred C. Newmeyer y Sam Taylor (1923). |
La navidad no es santo de mi devoción, aunque he de decir que esto no siempre fue así. Antes me encantaba, pero debe de ser que cómo casi todo en la vida pierde su magia, o hacen que la pierda.
Aún
así son unos días que no me disgustan. El problema viene cuando llega
el 31. Maldito 31 de diciembre. El 31 de diciembre todos colgamos de un reloj sin saber muy bien como sujetarnos, el 31 de diciembre, todos somos Hombres Mosca. El 31 de diciembre es pasado, presente y futuro y todo ello en cuestión de segundos.
Al 31 de diciembre lo único que le pido
todos los años es que no vuelva. Pero da igual, el sigue erre que erre, y
todos los años viene diciembre que ya es un palo, pero encima viene con
su día 31 a cuestas, como cuando tu ex novia encima de que viene se
trae un amiguito y disimuladamente te amarga el final de año. Además es
una noche en la que nunca pasa nada bueno y siempre pasa lo mismo.
Es como el día de la Marmota.
El
Día 31 te levantas tarde. Como si quisieses dormir toda el jodido dia y
despertarte, que sea día 1, no tener resaca y escuchar tranquilamente
la marcha radetzky mientras desayunas.
Pero no.
Te levantas. Error. Apenas te mueves durante el día, comes cualquier
cosa por casa y te dedicas a ver películas de antena 3 de esas que te
hacen plantearte como puede haber tantas películas de Serie B, y
sobretodo como puede ser que cada una que veas te parezca peor que la
anterior.
Te levantas del sofá a eso de las 19:00, y piensas coño me tengo que arreglar para ir a cenar.
Reflexión propia tras los hechos enunciados:
(Que gran estupidez. Que manía. Que cojones estamos celebrando, porque leches me tengo que poner elegante para despedir a este año de mierda, acaso se puso elegante él cuando se presento aquí con cara de malas pulgas y vientos en forma de problemas?. En fin. donde cojones están mis gemelos!?...)
Aún así, te arreglas para
despedirle. Como si te arreglaras para ir a la boda de una ex. Te pones
el traje, coges el tabaco y te vas a la iglesia con la cabeza bien alta.
Aunque en este caso ojalá fueras a una iglesia.
Llegas
a casa de ese pariente, -que suele ser tu abuela- hasta que cumples
digamos los 25 y entonces vas a casa de tu padre, y pasan mas días 31 y
al final están todos los delincuentes que has creado, reunidos en tu
puta casa, manchándote la moqueta de champán y corriendo por los
pasillos.
Gracias a Dios aun no se ha dado el
caso y sigo yendo a casa de mi abuela, a donde espero ir unas cuantas
nocheviejas mas, donde mejor se cena y se cenará nunca.
Bueno
a lo que íbamos, cenas y hasta ahí todo bien, todo perfecto, como
cualquier otro día señalado. Durante la cena has tratado de ignorar a tu
cuñada/barra/prima/barra/tia/barra/chicadeintercambio que tan nervioso
te pone, sin mucho éxito. y Después te pones la copa de antes de las
uvas. Todo genial. Sin enemigos en el frente. Pero de pronto. OJO.
Llega
el momento cumbre de la puta noche. Las jodidas Uvas. Que si. Que yo
entiendo que somos un pueblo hecho de este tipo de tradiciones. Pero es
que no puede ser mas absurdo. Este año voy a poner la Gopro encima de
la tele para que se den cuenta de lo desternillante y a la vez
deprimente de la escena.
Es toda una Tragicomedia.
Pongámonos
en situación. Imagínense una señora de no sé, 50 años, llamémosla Tia
Chelo. Con un vestido que le queda pequeño, para el cual lleva haciendo
dieta desde el 2 de enero, y aun así, un simple estornudo hará
que el botón del escote de su blusa se convierta en un Misil Predator
dirigido a impactar contra la mascota del anfitrión creando un conflicto
parecido al que creo el asesinato del Archiduque Francisco Fernando de
Austria.
Además, para colmo, esta tragando
uvas de dos en dos, ya que debido a su poca movilidad no puede
masticarlas y es incapaz de comer al ritmo que marcan las campanadas.
Entonces inevitablemente llega un momento, (suele ser cuando lleva 11
uvas en la boca) que la pobre Tia Chelo se empieza a poner morada, pero
ni corta ni perezosa y con un estilo digno de una señora de su porte,
coge la servilleta de tela de la cena y esputa una especie de picadillo
que bien se podría utilizar para alimentar al ganado o incluso para
hacer Mosto. En fin. Feliz año nuevo para ti también Tia Chelo. Bebe
champán anda, que así baja mejor.
Cuanto Glamour. La magia de Nochevieja.
Estas
costumbres de comer comida en poco tiempo y de una manera rápida es una
copia barata de Estados Unidos, y si no me creéis os seré mas
concretos.
La tradición de las Uvas se basa en "la leyenda del
indomable." SiSi. Tal cual. Paul Newman comiéndose 50 huevos duros.
"Puedo comerme 50 huevos" con dos cojones, la cosa es que adaptado a la
señora de mediana edad residente en un pueblo de Soria, con una
operación de juanetes a sus espaldas y un marido digamos -que no estaba
muerto nono, estaba de parranda- , la hazaña sería mas bien...
"Puedo comerme las 12 uvas en el tiempo indicado sin que el botón de mi blusa cause un conflicto armado"
Lamentablemente
la situación suele ponerse bastante fea y no voy a hacer bromas sobre
eso, digamos que Las señoras españolas no tienen la determinación ni el
estilo que tenia Paul Newman para comer. Y menos Mal.
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Paul Newman en "La Leyenda del Indomable" |
Bueno
pasamos a la siguiente Fase. La fase de salir. Aquí se divide por
edades. Pero lo cierto que salir el dia de nochevieja suele ser una mala
idea si estas en Madrid. Tengas la edad que tengas. En mi caso al menos siempre es un desastre.
Es por eso por lo que me he puesto a escribir esta entrada. Pero bueno,
vamos a hacerlo por edades, siempre esta bien ser ordenados.
De
16 a 25 se lía, bla bla bla. Todo mentira. Es la peor noche del año
para salir, no hay taxis, esta lleno de controles, todo es
carísimo...etc. Conclusión: Te puedes dar con un canto en los dientes
si entras en la Nuit.
La otra opción son unas
copas, que estaria de abuso si tus amigos estuvieran aquí, pero están
todos o esquiando, o con su familia, o con su novia, o fueron más rápidos que tú y pagaron por una fiesta guay cuando tu decías "Nochevieja? Bah queda mazo para eso".
En fin estas
solo. Pero eres inasequible al desaliento y acabas yendo a las copas de
una amiga de un conocido que jugaba al tenis contigo cuando estabas en
primaria, y allí te encuentras gente que te suena de algo pero en
realidad no conoces, que sensación de abandono, acabas bebiendo para
olvidar y sin dinero. Vaya noche.
Si tienes
entre 25-30 años, el tema de salir esta rodeado de un politiqueo especial. Es como aquello de mal de muchos consuelo de pocos.
Todo
empieza el 31 por la mañana tomando una caña, te encuentras con tu amigo
aquel de la universidad. Qué bien te veo, tú tampoco has cambiado nada,
las cosas no me podrían ir mejor. Nos hemos mentido, claro. Como
hacemos todos los años. Tomamos unas cañas y recordamos el día que
acabamos en casa de aquellas tías. Cómo se llamaban. Qué año fue. Al
despedirnos alguien propuso salir de fiesta esta Nochevieja, pero la
vida nocturna y la madurez no casan bien. Como el negro y el azul marino
o mi padre y un collar de calaveras. Los niños a las ocho están en pie,
yo pasaré Fin de Año en una casita rural con la familia, el día 1 tomamos el vermú con los padres de Ana. Esas cosas. Todas comprensibles y razonables.
Entonces
la conversación deriva en un breve debate sobre la necesidad de salir
el 31 de diciembre, a lo que el sanedrín de treintañeros concluye con
una sentencia que no me es ajena, que salir en Fin de Año es un coñazo.
No te lo pasas bien y te pierdes lo maravilloso que es levantarse
temprano al día siguiente y pasear por las calles vacías.
Ya os lo decía
yo, pero en el fondo no es que piensen así.
En la vida de un
treintañero nada es lo mismo.
Es algo así como el torneo del K.O.
Prefiero ganar la Copa a ganar la Liga.
Y que la realidad no te
estropee una bonita historia.
Pero bueno en definitiva el día 31 son muchas mas cosas que salir y pasártelo bien.
Es
el día de hacer backup, y ver lo que tenemos y lo que no teníamos tal
noche como hoy hace un año mientras me lamentaba porque otra vez, mi
plan de nochevieja había sido una puta mierda.
Es
el día de echar de menos a los que no están, a los que se han ido este
año, o a los que se fueron pero parece que siguen aqui, como el primer día.
Es
el día perfecto para escribir y como he podido ver en Fb a todos os ha
salido el Truman Capote que lleváis dentro. Por cierto, para el año que
viene que os salga también, pero para organizar algún Jaleo.
Es el día para pensar en que voy a mejorar de aquí en adelante.
Es
el día para pensar en tí y en si seguirás igual de guapa que todos los
años. Aunque a veces creo que no sería mala idea que te fueras con el 2014. Knock, knock, knocking on heavens door. Tranquila, Es momentaneo.
Es el día para pedir perdón por todo lo que has hecho este año que no era digno de un caballero ni de un cabrón.
Es
el día para hacer balance de la situación, de la crisis, de la
corrupción, de tu divorcio,de tu ruputura, de la buena o mala suerte en el sorteo de la champions, de si sacar o no entradas para Acdc, de si deberia haber escrito eso, de si puede ser que Blanca Padilla aparezca esta noche en la fiesta a la que vayas o de como es posible que haya tan pocas ideas para sostener un país tan
grande y a la vez tan pequeño.
Pero
sobretodo, es el día para plantarte impecable con el traje, tus mejores
galas y tu mejor puro. Plantarte delante del tiempo, y reírte. Reírte
en la cara del año que se va, y gritarle. Gritarle en la cara al año que
viene.
Gritarle
fuerte. Gritarle tan fuerte que te oiga este y todos los que vendrán
después. Gritarle. Chillarle. Gritarle tan alto como puedas aquello de:
"IM AS MAD AS HELL AND IM NOT GOING TO TAKE THIS ANYMORE."
Porque
si. Estamos locos, pero sabemos lo que queremos. Y puedo prometer y
prometo que, ningún año que venga por mucho miedo que nos de, nos
quitara lo único que es y será siempre nuestro, las ganas de seguir
luchando. Las ganas de seguir levantándonos día a día, las ganas de
seguir riendo, las ganas de seguir viajando, las ganas de seguir
bailando, las ganas de seguir trabajando, las ganas de seguir amando...
En definitiva las ansias de seguir viviendo.
Porque la vida son dos cubatas y uno igual que el que me acabo de beber ahora.
Feliz año a todos, especialmente a los que saben quien escribe esto. Seguid gritando como el primer día.
Abrazo.
Pd: Al próximo que me mande un whatssapp cursi y hortera de felicitacion del año, le voy a rebanar los huevos con un cúter. Y si no tiene huevos, que me llame.
XVIII.
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